domingo, 17 de enero de 2010

Piedra.

La piedra que gira.
La piedra que aviento que roza la acera.
La piedra aforme y también maciza.
La piedra que no es tuya ni es mía.
Ni de la mismísima tierra.
Que no posee, ni mucho menos desea.
La piedra no quiere.
No extraña resiente o piensa.
Quisiera ser piedra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario